Mi mejor respuesta es el silencio.

A veces tenemos tanto que decir, y nos callamos, ¿Por qué? tal vez para no meter la pata, tal vez para evitar discusiones, para evitar sufrimientos, para evitar muchas cosas... y a veces simplemente porque no merece la pena hablar, no merece la pena hablar sobre algo estúpido sin sentido, o sobre algo que ya has repetido mucho y que no te hacen caso, simplemente ya no vale la pena malgastar tus palabras, también a veces nos callamos porque no tenemos a alguien que nos escuche, a alguien que nos entienda, alguien en nuestra misma situación, alguien que te dé su apoyo, y que nunca se canse de que le cuentes tus problemas o alegrías.