No se cambia porque se quiere.

¿Las personas pueden cambiar? Pues yo creo que por una parte si se puede, y por otra parte no, porque muchas veces cambiar no es por gusto, si no que hay personas que te obligan ha hacerlo, tienes que aprender a ser más fuerte, a no dejarte mangonear o ser tan ingenua, y sin darnos cuenta cada segundo estamos cambiando, sentir algo nuevo que nunca has probado y que te guste puede hacerte cambiar, o darte cuenta de cosas que cambien tu forma de pensar; Pero creo que solo se puede cambiar cuando tu no te lo esperas ni te das cuenta, porque muchas veces las personas que dicen he cambiado para conseguir algo a cambio como por ejemplo un perdón por algo que hayan hecho, no creo que esas personas hayan cambiado de verdad, porque decir que he cambiado es solo un verbo conjugado, cambiar significa hechos, reacciones nuevas que nunca habías visto en ti, formas de pensar que nunca llegaste a imaginar... & las personas que intentan cambiar son las únicas que no lo hacen, porque de tanto intentar algo que no son fracasan, por eso hay que dejarse llevar y que sea el tiempo quien te cambie a mejor...

Tu mirada, mi delirio.

¿Tu mirada? Inexpresiva, no sabría como definirla, cuando nuestras miradas se cruzan y me la mantienes, intento buscarle algo, pero es una mirada tan neutra que lo único que le puedo sacar son interrogantes, y eso me mata, porque a veces preferiría una mueca o una sonrisa, que la maldita duda que siembra en mí.
Pera la verdad es que me encanta tu mirada, porque me matas con ella, me dejas sin aliento, siento algo en el estómago que me hace cosquillas, me haces ponerme nerviosa y temblar. Pueden que para los demás tus ojos sean unos simples castaños del montón, pero para mí son únicos, me encanta el brillo que hay en ellos, me encanta la intensidad de su color, y lo profundo que pueden llegar a ser.
Pero bueno, esa solo es una de las partes que me gustan de ti, porque en realidad me encantas de arriba a bajo y tal como eres.

Corre lejos, piensa & vuelve.

A veces me gustaría taparme los ojos y no ver todo lo que pasa a mi alrededor, sobre todo esos días negros, donde todo sale mal, y no logras encontrar algo positivo de todo lo que ha pasado en el día, y así con los ojos tapados correr, correr muy lejos irme lejos escuchar el mar por la mañana y por la noche ver las estrellas, y al día siguiente tener todo claro y volver a la rutina de siempre, pero con las ideas claras, con una sonrisa de verdad en los labios y con un brillo en los ojos de esperanza.
Pero no siempre se puede hacer eso, no siempre ahí tiempo para correr lejos meditar y luego volver, y entonces todo lo que tienes dentro se acumula, y las dudas que no puedes resolver se quedan ahí, y se va llenando todo como un vaso de agua gota a gota, hasta que ese vaso rebosa, y entonces solo quieres llorar, gritar y buscar un culpable de todo lo que te ocurre, pero sabes que la lucha solo lo tienes contigo mismo, que podrías dar más de lo que das, que podrías plantar cara y decir lo que piensas, defender injusticias y tener el suficiente valor de acercarte a alguien y decirle todo lo que sientes.