Adiós 23.

Y así han ido pasando los días, semanas, meses.. hasta llegar al año y siempre lo mismo, la misma monotonía, y aunque una vez pensé que nunca me arrepentiría de la razón de mis sonrisas, puede que me equivocara, aunque en realidad no me arrepiento, es otro sentimiento, y es de sentirse estúpida, muy y muy estúpida, como haber vuelto a estar ciega otra vez y creer que siempre me pasara lo mismo, que nunca avanzaré, que siempre estaré sola, porque soy de ideas firmes y sentimientos puros, que a mi no me sirve cualquier persona que se fije en mi.No, no soy una chica fácil, siempre me fijo en lo difícil, en lo imposible, en lo que sé que nunca podré conseguir, y por mucho que haga no se puede cambiar eso, y son cosas que no elijo yo, si no que simplemente soy así, soy soñadora, y ilusionista, por cualquier mirada, o sonrisa, ya empiezo a montar historias en mi cabeza, para luego caer desde un tercer piso asegurando mi caída. Siempre ando perdiendo el tiempo, porque aunque sea joven, aunque me queden muchos de años más, quiero empezar a equivocarme como otra persona cualquiera, quiero dejar de caer por el mismo motivo pero con piedras diferentes, pero con golpes igual de dolorosos, que hace que al final no quiera a ninguna y salga huyendo. Esta situación es tan agobiante.. no puedo con ella, porque aunque intento mantenerlo en secreto, ya no puedo negarlo más, ya es hora de decirte adiós de verdad, y empezar a intentar decir a otros "hola", aunque creo que realmente lo que me vendría bien sería pasar una temporada neutra, sin sentimientos, ni atracciones, simplemente porque siempre querré aquello que no tendré, y estoy harta de eso, sobre todo si me hago ilusiones, que se rompen con el tiempo y nunca se llega a cumplir; Exacto eso tengo que hacer, no querer a nadie, cerrar mi corazón para que nadie se cuele en él, y así dejarlo vacío mientras se barren esas últimas cenizas, de un amor que se apago con la luz de la realidad, apagando el fuego que una vez hubo. Ya no puedo negarlo más, ni seguirme engañándome así, solo por tener miedo a salir de la rutina de hace un año, ya no, ya no más, merezco un poco de vida, y dejar de preocuparme por esas tonterías cuando tendría que preocuparme por cosas que realmente valen la pena. Ya está, ya me quite esa venda que tenía desde hace mucho tiempo puesta y no me dejaba ver, pero.. ¿Sabes que es lo peor de todo? Que esa venda me la puse yo sola.