La mayoría de veces hasta tus propios amigos, le pones ilución a una cosa, se lo cuentas y en vez de apoyarte te dice algo que te hunde, que te quita las ganas de hacerlo, ¡Vaya, pensaba que los amigos se apoyaban!
¿En qué mundo vivimos? Ya no se puede ni confiar en tu propia sombra, todo es pura superficialidad, nada es real, nada se ve como antes se veía, ahora tener principios solo es ser guapo, y muchos amigos, pero ¿Para qué se quieren tantos amigos? Si ni a la mitad se puede confiar en ellos, después aparece alguien con gustos diferentes y lo excluyen ¡Ni que tubiera la lepra! Estamos viviendo en un mundo indignante, donde solo somos felices el 40% de las situaciones, siempre hay algo que te come la cabeza, que no te deja concentrarte en tu deber, que no te deja ni dormir,cosas tontas pero a la vez importante, todo un mundo de confusión en tu mente, esperando a que un día te dé un respiro...
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